Lewis Hamilton pasó de casi no correr a vencer. Su Mclaren MP4-24 sufrió una avería, y los mecánicos del equipo de Woking tuvieron que trabajar duro para que Lewis fuera de la partida. Salvaron por poco ese peligro. Sin su Mclaren completo, Hamilton salió del garaje y avanzó hasta la meta donde los trabajadores de su escudería siguieron trabajando. Casi 60 vueltas después (56), Lewis vio la bandera a cuadros en línea de meta, completando la gran labor de sus mecánicos: había vencido en el circuito de Shangai, siendo el primer piloto en ganar una carrera de 2011 sin llamarse Sebastian Vettel.
Fue la estrategia quien marcó el destino de la carrera. Por un lado, estuvieron los pilotos que hicieron tres paradas. Por ejemplo el vencedor Hamilton. O Mark Webber, que pese a salir en las últimas posiciones hizo una espectacular remontada y alcanzó el podio en tercera posición. Button fue cuarto y Rosberg quinto, los dos con tres paradas. Completó el podio Sebastian Vettel, cuyos neumáticos le impidieron defender su primera posición con respecto a Hamilton y por ello perdió la carrera. El alemán de Red Bull iba a dos paradas.
También a dos fueron los dos Ferrari, que fracasaron y llegaron sexto y séptimo, con el brasileño Massa delante de su compañero Fernando Alonso. Llegaron a las últimas vueltas con poco ritmo a causa de sus gomas. Y eso que Felipe incluso había llegado a pelear por la victoria, pero un nuevo fallo en el muro fulminó su oportunidad. Alonso, sin embargo, no tuvo demasiado ritmo durante toda la jornada. También en el bando de los españoles, Jaime Alguersuari se llevó la palma de la mala suerte. Salió de boxes tras su primera parada y su neumático se le desprendió. Tuvo que retirarse. Nadie más lo hizo, ya que los Hispania esta vez sí finalizaron el gran premio completo, un gran paso para sus objetivos.
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